Bailado
Hoy acabo de regresar de bailar. Fue realmente divertido aunque hay algo que no entiendo: ¿por qué no estaba nervioso?. En fin, creo que normalmente debería de estarlo siendo que no es una actividad cotidiana, sin embargo estaba muy normal, hasta emocionado diría yo. Me sorprendió que el estacionamiento había que pagarlo en el momento, y después de eso hicimos como media hora de cola y nos dejaron pasar. Platicamos unos minutillos en una mesa y curiosamente una de las 4 tipas de la mesa de un lado me empezó a mirar insistentemente, muy insistentemente y a bailar al mismo tiempo..... que cosas! pero la ignoré y se consiguió a alguien mas.
Después de que el grupo abrió, me quedé viendo cómo bailaba la gente unas 3 o 4 canciones, agarrando un valor que no me faltaba, y luego le dije a Tahitze que ya bajáramos. Me llevó de la mano, lo que me hizo sentir un poco raro, pero intenté superarlo lo mas pronto posible. Ya bailando todo se me olvidó (hasta que no sabía baliar) y el tiempo pasó dramáticamente rápido.
La siguiente vez que ví el reloj eran las 2 de la mañana y obviamente al hacer de mi conocimiento ésta información me cansé inmediatamente. Nos fuimos a descansar un poco a una bancota que está cerca del baño. Tenía algo de sed pero como iba muy pobre decidí no aventurarme, además le había prometido a mi papá no tomar nada (cosa innecesaria porque cuando llevo carro nunca tomo nada). Allí en la banca y casi a gritos me platicó de su papá, de su hermana y muchas otras cosas, pero en menos de media hora volvimos a la pista.
En la pista me encontré a alguien que tenía la pinta de conocer, aunque sin lentes y de espaldas no me atrevía a concluir que era ella. Después de un rato, luego de voltear insistentemente lo confirmé: ¡era mi amiga alejandrina! No lo podía creer, era demasiada coincidencia, aunque a decir verdad desde que iba a entrar tenía la inminente sensación de que encontraría a alguien y que sería una agradable experiencia.
También había una chava que se parecía ligeramente a la hija (claudia) de mi maestra de canto (betty) y otra que se parecía dramáticamente a una compañera de la escuela que se llama adry. La forma en que las chicas se vestía no era para desviar la mirada, y aunque intentaba no pensar en eso era imposible no darse cuenta.
Al poco rato, mi compañera de baile comenzó a "subirse de tono" y cuando pusieron la canción de reversa me restregó el trasero, pero no contenta con mi respuesta (nula) me besó en el cuello.
El tiempo siguió pasando y a las 4:30 nos salimos del lugar y la llevé a su casa. Al estar sentado se me quitó el cansancio y nos quedamos platicando y el tiempo pasó, desafortunadamente el cansancio también y cuando me despedí para no quedarme dormido en su presencia, ya completamente cansado y ausente, se movió en el último momento y me plantó un beso en los labios. Recuerdo que pensé: ¡No! y después: ¡sus labios! ¡la sensación de suavidad! pero estaba tan dormido que tal sensación no duró mas de 3 segundos y no encontró reverberancia ni intelectual ni emocional y me quedé vacío, hasta de sorpresa....
En fin, luego de unas pocas palabras y de volverme a despedir (y que pasara lo mismo) me regresé a casa. Recuerdo que una camioneta tipo torton iba bastante rápido y me prendí. No fué hasta el semáforo del tizoc cuando tuve la oportunidad de dejarla atrás y sentí una gran satisfacción, pues no me podía alcanzar. Nuevamente en el semáforo, esta vez de la gasolinería, nos encontramos pero la volví a dejar y tras llegar a casa con la adrenalina en las venas decidí no dormir.
Después de que el grupo abrió, me quedé viendo cómo bailaba la gente unas 3 o 4 canciones, agarrando un valor que no me faltaba, y luego le dije a Tahitze que ya bajáramos. Me llevó de la mano, lo que me hizo sentir un poco raro, pero intenté superarlo lo mas pronto posible. Ya bailando todo se me olvidó (hasta que no sabía baliar) y el tiempo pasó dramáticamente rápido.
La siguiente vez que ví el reloj eran las 2 de la mañana y obviamente al hacer de mi conocimiento ésta información me cansé inmediatamente. Nos fuimos a descansar un poco a una bancota que está cerca del baño. Tenía algo de sed pero como iba muy pobre decidí no aventurarme, además le había prometido a mi papá no tomar nada (cosa innecesaria porque cuando llevo carro nunca tomo nada). Allí en la banca y casi a gritos me platicó de su papá, de su hermana y muchas otras cosas, pero en menos de media hora volvimos a la pista.
En la pista me encontré a alguien que tenía la pinta de conocer, aunque sin lentes y de espaldas no me atrevía a concluir que era ella. Después de un rato, luego de voltear insistentemente lo confirmé: ¡era mi amiga alejandrina! No lo podía creer, era demasiada coincidencia, aunque a decir verdad desde que iba a entrar tenía la inminente sensación de que encontraría a alguien y que sería una agradable experiencia.
También había una chava que se parecía ligeramente a la hija (claudia) de mi maestra de canto (betty) y otra que se parecía dramáticamente a una compañera de la escuela que se llama adry. La forma en que las chicas se vestía no era para desviar la mirada, y aunque intentaba no pensar en eso era imposible no darse cuenta.
Al poco rato, mi compañera de baile comenzó a "subirse de tono" y cuando pusieron la canción de reversa me restregó el trasero, pero no contenta con mi respuesta (nula) me besó en el cuello.
El tiempo siguió pasando y a las 4:30 nos salimos del lugar y la llevé a su casa. Al estar sentado se me quitó el cansancio y nos quedamos platicando y el tiempo pasó, desafortunadamente el cansancio también y cuando me despedí para no quedarme dormido en su presencia, ya completamente cansado y ausente, se movió en el último momento y me plantó un beso en los labios. Recuerdo que pensé: ¡No! y después: ¡sus labios! ¡la sensación de suavidad! pero estaba tan dormido que tal sensación no duró mas de 3 segundos y no encontró reverberancia ni intelectual ni emocional y me quedé vacío, hasta de sorpresa....
En fin, luego de unas pocas palabras y de volverme a despedir (y que pasara lo mismo) me regresé a casa. Recuerdo que una camioneta tipo torton iba bastante rápido y me prendí. No fué hasta el semáforo del tizoc cuando tuve la oportunidad de dejarla atrás y sentí una gran satisfacción, pues no me podía alcanzar. Nuevamente en el semáforo, esta vez de la gasolinería, nos encontramos pero la volví a dejar y tras llegar a casa con la adrenalina en las venas decidí no dormir.
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